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Nuestra apuesta es por el diálogo social para construir un camino de justicia y reconciliación que nos lleve a la paz. Queremos abrir horizontes de diálogo para construir la paz

Fotografías: Arquidiócesis Primada de México

La comunidad Jesuita en México ha enfatizado en que el asesinato de los misioneros Javier Campos y Joaquín Mora, en la Sierra Taraumara, están abriendo puertas para la paz. 

Prueba de ello el mensaje emitido por la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), la Conferencia de Superiores Mayores de Religiosos de México y la Provincia Mexicana de la Compañía de Jesús.

Como católicos somos llamados a una Jornada de Oración de la Paz que ya inició, pero en la que podemos seguir participando durante el mes de julio.

ACCIONES

El mensaje nos pide, durante todo el mes de julio, celebrar Misas o realizar actividades comunitarias en lugares significativos que representen a personas desaparecidas, asesinadas o víctimas de exclusión.

Será el 31 de julio cuando la Iglesia, de manera general, se congregue en oración precisamente por los victimarios, por sus vidas y la conversión de sus corazones.

10 DE JULIO

La fecha clave de las cuatro acciones concretas convocadas por la Iglesia en México, en la que se vio viva la Jornada de Oración por la Paz.

La comunidad Jesuita en México se dio cita en la Estela de Luz, en la Ciudad de México, “para pedir por las personas desaparecidas, por periodistas asesinados, por las víctimas de feminicidios”.

PARTICIPACIÓN

El diario Desde la fe reportó actividades en la Basílica de Guadalupe, desde donde se pidió a la comunidad “no acostumbrarse a la violencia”.

En la Catedral Metropolitana se pidió porque cada mexicano asuma su “propia responsabilidad, como ciudadanos, como Iglesia, puesto que todos formamos parte de esta sociedad que necesita ser sanada”.

La Ciudad de México fue epicentro de más peticiones a las que se sumaron fieles católicos convencidos de querer la paz, como en la Estela de Luz, la iglesia de La Sagrada Familia (Colonia Roma) y en la parroquia de San Pedro Mártir (Tlalpan).

En otros estados como Puebla, Tuxtla Gutiérrez, Colima, Campeche y Tamaulipas, también se alzó la voz por la paz en México.

RESPALDO

La Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) agradeció a más de 50 millones de personas católicas y no creyentes que vivieron la primera Jornada de Oración por la Paz en México. 

Aseguró que al menos en 4 mil 651 parroquias fueron recordados los sacerdotes, religiosos y religiosas que han sido asesinados y desaparecidos en el país.

PROVINCIA

La Provincia de Hidalgo se sumó de esta forma al llamado de la Iglesia en México y exhortó a todos los sacerdotes a recordar a las víctimas de la violencia y a orar por la paz.

En Tulancingo, Huejutla y Tula se ofrecieron las Eucaristías dominicales por los sacerdotes y religiosos asesinados.

Desde la arquidiócesis, Mons. Domingo Díaz Martínez opinó que “se debe de cambiar la estrategia de seguridad en el país”.

Y, según lo emitido en un comunicado, será el 23 de julio cuando se viva una Peregrinación Juvenil por la Paz en Pachuca, desde las 09:00 horas, para terminar con la Eucaristía en el Monumento a Cristo Rey.

Además piden a sacerdotes promover el rezo del Rosario todos los días, en especial el 30 de julio; peticiones y oración por la paz en tlas Eucaristías del mes y la exposición de Jesús Sacramentado durante cuatro horas.

Las Diócesis de Huejutla y Tula también se han sumado con ofrecimientos de las Eucaristías y la oración por la paz.